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nuria
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ENTREVISTA. Pregunta 4: ¿Y qué es con la Madre?

A continuación mediante una serie de diferentes post (uno por pregunta y día) voy a ir copiando la entrevista sobre educación en el hogar que me han hecho para un trabajo de la Universidad Sara, Rita, Laura y Paula, estudiantes de 1º de Educación Primaria de Santiago de Compostela (La Coruña, España). Entrevista realizada el 6 de Diciembre del 2011.

 

Pregunta: Muchas madres que están en la misma situación que la suya explican que en muchas ocasiones abandonan totalmente sus vidas profesionales para dedicarse las 24 horas del día a la educación de sus hijos. Pero, una vez que sus hijos se hagan mayores, ¿Cómo ve usted su futuro?

 

Maravilloso. Cada etapa tiene cosas muy bonitas. Cuando viví 100% volcada a mis hijos, fue mágico. Me permitió redescubrirme y sanar muchísimas cosas de mi mente y de mi infancia. También afianzó los lazos familiares (por mi mayor apertura y comprensión hacia mis padres) y desarrolló mi niña interior, mi alegría, el juego de la vida… Era como comenzar a ver todo con unos ojos nuevos más frescos, abiertos y luminosos. Además, eso de pasarte el día jugando sin tener que justificarte por ello era muy divertido…

Ahora estoy gran parte del día en el coche llevando a niños aquí y allá. No sólo a los míos, también a sus amigos por no disponer sus padres del mismo tiempo que yo. Y, cuando están con ellos, aprovecho para hacer muchas cosas de un modo más efectivo ya que me cunde mucho más el tiempo, ofreciéndome una gran satisfacción.

Mis hijos disponen ya de una edad y una autodisciplina que les permite estudiar solos en el ordenador, requiriéndome sólo para cosas concretas y mantener el control.

Los ratos que comparto con ellos son muy agradables y las conversaciones, más y más interesantes.

En un futuro aprovecharé del mayor silencio y de la libertad y amplitud de tiempo. Soy una mujer con muchas inquietudes internas, que disfruta con muy pocas cosas y eso me da una imagen de futuro muy halagüeña.

Mi profesión no ha de cambiar, ya que es compatible con su educación en casa. Con su presencia y con su ausencia.

Mi vida no está basada en mis hijos sino integrada y compartida con ellos. Mi vida está basada en mi crecimiento interior y en mi goce interno de la vida. Si nuestras vidas no tienen un enfoque filosófico o espiritual, está claro que éste puede ser un gran problema pero en esos casos, el problema no surge cuando los niños se van, el problema ya está antes. Éste de seguro que no es mi caso.

Además, como vivimos en comunidad, mis hijos no tienen por qué sentir la necesidad de alejarse de mi lado cuando lleguen a la edad adulta o convivan con sus respectivas parejas o amistades ya que siempre tendrán un espacio en la comunidad y en ella yo tan sólo soy una más.

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